SUCUMBÍOS, Ecuador –El cantón Putumayo- provincia de Sucumbíos, está ubicado en el cordón fronterizo amazónico entre Ecuador y Colombia. Lo único que separa a estas dos naciones es el río Putumayo. A lo largo de su ribera, se encuentran más de 20 comunidades en las que viven alrededor de 3.000 mil personas de la nacionalidad Kichwa.
Según la población, para una mujer de cualquiera de estas comunidades, resulta difícil tener acceso a servicios de salud que posibiliten llevar adelante un embarazo saludable y tener un parto seguro. Barreras importantes en la atención de la salud materna, son la distancia y la falta de transporte fluvial, razones por las cuales en años anteriores habrían contribuido a elevar los índices de mortalidad materna en la provincia.
“La mortalidad materna es el resultado de la suma de varios factores que contribuyen a la misma, si bien toman gran importancia los factores biológicos, los otros determinantes de la salud como los factores ambientales (acceso a servicios básicos), factores sociales y culturales (etnia, escolaridad), factores económicos, constituyen también causales de la muerte materna,” indica la Ministra de Salud Pública, Dra. Margarita Guevara.
En las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censo-INEC, han quedado registrados entre el 2007 y el 2014, en la provincia de Sucumbíos, 32 casos de muerte materna, a causa de hemorragias obstétricas, trastornos hipertensivos, infecciones, entre otras. De las mismas, un 67% se produjo durante el posparto, 25% durante el embarazo y 8% durante el parto. De este total provincial de muertes maternas el 17% ocurrieron en el cantón Putumayo.
“Mi labor se centra en movilizar y coordinar con todos los promotores de salud de 6 cantones y distritos, para facilitar el acceso de las personas a los Centros de Salud y al hospital de una forma más rápida y eficiente…” señala Margarita Mamallacta, una mujer de 45 años que ha dedicado los últimos 15 años de su vida a ayudar a otras mujeres a salvar su vida y la de sus bebés, como promotora de salud y ahora como presidenta de la Asociación de Promotores Tradicionales Indígenas de Salud de Ecuador (APTISE), filial de la Federación de Organizaciones de la Nacionalidad Kichwa de Sucumbíos-Ecuador-FONAKISE.
Margarita Mamallacta, cuenta que “el rol que juegan las promotoras de salud es importante porque son quienes propician la relación entre la comunidad y el sistema de salud”. Agrega que “…cuando una mujer llega a un centro de salud de la mano de una promotora, su atención es mucho más personalizada, porque ya la conocen y saben de qué comunidad proviene y es más fácil identificar por ejemplo, cuántas mujeres embarazadas hay, o qué tipo de enfermedades padecen porque todo está organizado”.
Durante el embarazo y el parto, la demora en reconocer las señales de peligro, buscar ayuda, llegar a un centro de salud y acceder a la asistencia por parte de personal calificado, son tres obstáculos determinantes que enfrenta una mujer embarazada de esta zona. Es justamente la articulación de la Red de Cuidado Obstétrico Esencial Comunitario-Red CONE Comunitaria, el factor de éxito que ha tenido el cantón Putumayo para lograr que en los últimos dos años, no se haya producido ni una sola muerte materna.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas, UNFPA, apoyó al Ministerio de Salud Pública, MSP en el fortalecimiento de las capacidades de las y los promotores de salud, quienes, como indica Margarita Mamallacta, son el primer punto de contacto entre la comunidad y el personal de salud. “El MSP y el UNFPA, han jugado un papel fundamental porque a través de capacitaciones, hemos aprendido a detectar las principales señales de peligro durante el embarazo y qué se debe hacer”.
Las promotoras se han convertido en lideresas, agentes multiplicadoras de conocimientos “Después de un taller, el promotor regresa a su comunidad y comparte con los socios y las parteras los avances,” asegura Mamallacta.
Un Modelo de Atención Diseñado a la “Medida Para Salvar Vidas”
Generalmente el lugar donde llegan las mujeres embarazadas es al Centro de Salud de Puerto El Carmen en el cantón Putumayo. Para llegar ahí, deben viajar entre 2 y 8 horas por el río. La atención que brinda el Centro de Salud, se ha convertido en un modelo a seguir, debido a que ha adoptado las medidas necesarias para poder brindar un servicio de atención institucional de calidad y con pertinencia intercultural.
Con la ayuda de Margarita Mamallacta y las promotoras de salud de las diferentes comunidades, el personal del Centro de Salud de Puerto El Carmen, llevan un registro personalizado y actualizado de todas las mujeres embarazadas que se encuentran en cada comunidad. El Dr. José Luis Palma Vélez, uno de los médicos rurales que trabaja en Puerto El Carmen, señala que “de esta forma, a cada mujer se le da seguimiento, inclusive, si ha faltado a una cita de control prenatal, se le puede ubicar fácilmente y proporcionarle el apoyo necesario para que cuente con la atención médica que requiere”.
Como es el caso de muchas mujeres indígenas de la región, el idioma y las costumbres propias de cada cultura, a veces representan barreras que las frena al buscar la atención de salud. Sin embargo, en Puerto El Carmen, el personal de salud y los promotores de salud, en lugar de verlo como un problema, lo ven como una oportunidad, adecuando la sala de parto para poder brindar una atención con pertinencia intercultural, respetando los saberes y tradiciones de las nacionalidades indígenas. “Aquí la mujer decide cómo quiere dar a luz, se respeta su derecho a tener un parto en libre posición,” asegura el Dr. Palma Vélez.
“Las mujeres que llegan al Centro de Salud pueden venir acompañadas de su pareja, familiares o de su partera y en la atención se les garantiza que se les brindará un parto seguro, en el que se les respetarán sus costumbres,” así lo destaca el Dr. Palma Vélez.
La Ministra de Salud Pública, Margarita Guevara señala que “Equipar y mejorar la atención de las unidades de salud son objetivos que persigue el Ministerio de Salud Pública, con una firme decisión de reducir la mortalidad materna y de brindar la mejor atención a las mujeres embarazadas.”
Esto ha dado como resultado que cada vez sean más las mujeres que quieren venir a atenderse al Centro de Salud, que actualmente atiende un promedio de 6 partos al mes. Esto llevó al Ministerio de Salud Pública-MSP a trabajar junto con la comunidad para cerrar la brecha del transporte y las comunicaciones, que por años había dificultado el acceso a los servicios médicos de calidad que el Centro de Salud ofrece.
Cerrando Brechas para Salvar Vidas
Un logro importante para que la coordinación entre la comunidad y el Centro de Salud sea efectiva fue la activación por parte del Distrito de Salud de la Red fluvial de transporte y comunicación. La adquisición de 5 radios comunitarias y una repetidora con el apoyo del UNFPA y el Fondo de Seguridad Humana de las Naciones Unidas, permitió a parteras y promotoras/es de salud de cada comunidad, tener acceso directo a las unidades de salud del cantón, posibilitando informar y actuar de inmediato ante una emergencia obstétrica. El alcance de estas radios se logró con el apoyo del Gobierno Autónomo Local (GAD) liderado por la Alcaldesa, Genny Ron Bustos, quien permitió la apertura de la frecuencia, posibilitando un enlace integral de comunicación con las radios comunitarias con las que ya contaba el GAD.
Con el apoyo del UNFPA también se logró equipar con insumos, una embarcación que se convirtió en un bote-ambulancia para atención de emergencias obstétricas. La comunidad la bautizó como “Jambi Killa” que significa la “Canoa de la Salud”. Esta embarcación navega por el río para atender cualquier emergencia y trasladar a las mujeres embarazadas al Centro de Salud de Puerto El Carmen.
El Dr. Palma Vélez indica que “una vez que la mujer llega a Puerto El Carmen es evaluada por el personal y de requerirse, se activa la red de transporte terrestre y la mujer es trasladada al hospital provincial para su atención”.
El Cantón Putumayo ha demostrado que es posible articular acciones con miras a mejorar los servicios de salud materna con la participación activa de la comunidad, a través de una red de promotores de salud, la Red CONE Comunitaria, la Asociación RIOS, la Federación de Nacionalidades Kichwas de Sucumbíos, el gobierno municipal, el Ministerio de Salud Pública, Distrito de Salud 21D03 Cuyabeno-Putumayo y el UNFPA.
Entre todos, han logrado mitigar situaciones críticas sobre la base de una coordinación intersectorial efectiva y el respeto a los derechos humanos, poco a poco están incidiendo sobre las brechas de desigualdades existentes. Esto ha contribuido a disminuir una de las deudas más importantes que quedó pendiente de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y que es ahora una de las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030: reducir significativamente la mortalidad materna.
“La visión estratégica del UNFPA consiste en apoyar al Gobierno en el fortalecimiento de la Estrategia Nacional “Ecuador Sin Muertes Maternas”, tomando en cuenta el tejido social de las comunidades, para brindar soluciones interconectadas que se adopten al contexto y a la realidad de cada una de ellas,” indica Mario Vergara, Representante Auxiliar del UNFPA en Ecuador.
El Cantón Putumayo es un ejemplo para el mundo, de cómo a través de la suma de voluntades, es posible disminuir la mortalidad materna, hacer valer los derechos humanos, vencer todo tipo de obstáculos y salvar vidas.
Texto: Guadalupe Valdés / Fotos: UNFPA, José Antonio Guayasamín