Ecuador cuenta con 3,7 millones de mujeres que son madres según la Encuesta de Condiciones de Vida (2014). Ante estos números, la respuesta en salud sexual y reproductiva y a la prevención de la violencia basada en género en el contexto de la situación de emergencia, que se vive luego del terremoto del 16 de abril, es un imperativo.

En este sentido, el UNFPA, Fondo de Población de las Naciones Unidas, se encuentra en terreno ya con los kits de salud sexual y reproductiva listos para su distribución tanto en Manabí como en Esmeraldas, dos de las zonas más afectadas por el movimiento telúrico. Los kits serán entregados a partir de hoy, a través del personal del Ministerio de Salud Pública, de las zonas afectadas. En números esto se traduce en 259.200 condones masculinos, 3.780 condones femeninos, 1.500 productos para parto limpio, entre otros diversos productos que constituyen estos kits.
Aunque se han visto avances en posponer la maternidad, aún a escala nacional la franja etaria entre los 20 y 29 años es la de mayor fecundidad. Los índices demuestran que las madres primerizas están mayoritariamente entre los 15 y 19 años: es decir, mujeres jóvenes y adolescentes que ya son madres y que precisan servicios e información en materia de salud sexual y reproductiva.
Un aspecto muy importante, que suma posibilidades de vulnerabilidad a las mujeres en casos de emergencia humanitaria, es que muchas de ellas son jefas de hogar. Acorde a los datos de la mencionada encuesta, si bien la mayoría de las madres está casada o en unión libre, 2 de cada 10 son jefas de sus hogares.

Por ello, la próxima semana el UNFPA estará proporcionando los kits de seguridad para su distribución. El principal objetivo de estos insumos es prevenir la violencia basada en género, particularmente la violencia sexual, en el contexto de las emergencias.

Recordemos que antes del desastre 6 de cada 10 mujeres vivían situaciones violencia en Ecuador, y que 1 de cada 4 mujeres había sufrido violencia sexual, siendo Manabí y Esmeraldas las provincias con mayor índice. Por ello, una respuesta eficiente y oportuna a este tema es fundamental, ya que las mujeres, adolescentes y niñas se tornan aún más vulnerables en contexto de emergencias.

En este sentido, el UNFPA ha desarrollado una serie de capacitaciones a las Fuerzas Armadas, institución que administra los albergues, en el marco de la respuesta a la emergencia humanitaria sobre abordaje para prevenir la violencia basada en género.

Asimismo, en coordinación con el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos se ha trabajado para la publicación de una guía sobre qué hacer en casos de violencia basada en género, cuáles son los protocolos que deben implementarse y a dónde pueden recurrir las personas víctimas de esta situación.

El UNFPA es una agencia de cooperación internacional para el desarrollo que contribuye a que las mujeres y los jóvenes puedan llevar vidas sanas y productivas. Es la agencia principal de las Naciones Unidas que colabora a que todo embarazo sea deseado, todo parto sea sin riesgos y a que cada persona joven alcance su pleno desarrollo.

UNFPA promueve el derecho de cada mujer, hombre, niño, niña, joven y adolescente, a disfrutar de una vida sana, libre de VIH y sida, con igualdad de oportunidades para todas las personas.