Cada día, cientos de miles de niñas de todo el mundo sufren daños físicos o psicológicos con el pleno conocimiento y consentimiento de sus familiares, amigos y de sus comunidades, y si no se toman medidas urgentes, la situación podría empeorar.
Esas son las conclusiones del principal informe del UNFPA, el Informe sobre el Estado de la Población Mundial 2020. El informe examina el origen y la extensión de las prácticas nocivas en todo el mundo, y lo que hay que hacer para detenerlas. Además, identifica 19 prácticas nocivas (que van desde el planchado de senos hasta las pruebas de virginidad) que se consideran violaciones de los derechos humanos. Sin embargo, centra en tres prácticas particulares que son generalizadas y persistentes, a pesar de la condena casi universal: la mutilación genital femenina, el matrimonio infantil y las uniones tempranas, y la preferencia por los hijos varones.